– Marina Muñoz Cervera –
La sandía nos llena de antioxidantes.
El tallado de esta fruta permite crear formas y figuras que, además de decorar, pueden ayudar a nuestros hijos a comer.
Esta cabeza de tiburón con la boca llena de pulpa de sandía sugiere que comamos sandía y ese mensaje es el que captan los niños.
La pulpa de la sandía contiene luteína, un antioxidante necesario para la visión ocular, entre otros, como pigmentos carotenoides.
Última revisión: 14-09-18